Fuente de la nota: Diario Ovación
El atacante de 22 años fue el que más quiso en la ofensiva de un equipo carbonero que volvió a quedar en el debe en el ataque.
Agustín Canobbio en Peñarol. Foto: Estefanía Leal.
El rendimiento ofensivo de Peñarol no viene siendo el mejor ni el esperado, pero Agustín Canobbio volvió a demostrar que en este equipo puede ser perfectamente titular.
Si bien Mauricio Larriera buscó opciones para mejorar en el empate sin goles frente a Wanderers, la lesión de Damián Musto, quien sufrió una distensión muscular que lo obligó a abandonar el campo de juego en el Parque Alfredo Víctor Viera a los 29’ de la primera parte, hizo que el técnico carbonero mandara un cambio y la primera opción fue la de Agustín Canobbio.
El atacante de 22 años volvió a ingresar desde el banco de suplentes y con el paso de los minutos se transformó en uno de los jugadores más importantes en la ofensiva.
El ingreso de Canobbio hizo que Pablo Ceppelini pasara al doble cinco junto a Jesús Trindade y Agustín Dávila se ubicó por detrás de Agustín Álvarez Martínez.
Canobbio no logró desnivelar en la primera parte, pero en el inicio del complemento fue clave en el ataque de Peñarol porque protagonizó las situaciones más claras.
Primero remató suave de media distancia, después le puso una notable asistencia a Agustín Dávila, quien estuvo a punto de anotar pero su remate dio en el palo cuando definió solo frente a Ignacio De Arruabarrena, y luego definió dentro del área obligando a una gran intervención del arquero bohemio.
Con chispazos de explosión, velocidad, buen manejo de pelota y generando chances claras en la ofensiva, Agustín Canobbio volvió a demostrar que en este equipo está para ser titular y le mandó señales más que claras al entrenador que sabe que puede contar con un atacante que le ofrece variantes, algo que necesita Peñarol para cortar con la sequía goleadora en el Torneo Apertura 2021.